Gran partido el presenciado el pasado sábado en Alcorcón, en
los campos de la URJC. Se
Al ver calentar a ambos equipos se podía uno imaginar el
tipo de juego de cada equipo y la apuesta por el rugby que cada uno iba a plantear, pero luego,
durante el encuentro, no todas las previsiones se cumplieron.
En principio, la apuesta de los locales, alegre, dinámica y
con velocidad endiablada se cristaliza en el primer ensayo de Arce, por todo el
centro, tras romper la línea de Ávila. 5-0, al no transformar Dalton el ensayo.
La apuesta visitante, en los siguientes minutos, era la
penetración reiterada de sus delanteros en percusiones de muchos metros y dando
continuidad a un juego agrupado y contundente. Eso les llevó a conseguir su
primer ensayo muy celebrado por sus seguidores. 5-5. Tampoco se pudo
transformar.
Siguen las apuestas por el juego de cada uno y en los siguientes
minutos el equipo local, pese a no gozar de mucha posesión del balón, conseguía
enlazar rápidas jugadas que los abulenses no podían contrarrestar y Ufo en
primer lugar y luego Chile a pase de un gran Virus tras jugada de Ufo, pusieron
los 15-5 que seguía Dalton sin redondear con el pie.
En mitad de la borrachera local y tras una brillante jugada
de Chile se pone el 20-5 en el marcador y Dalton se dispone a volver a lanzar a
palos la transformación…. Se escucha un “una cerveza si lo metes…” y lógicamente,
Dalton, que es como uno de los normandos de Astérix y no perdona una cerveza, consigue los dos puntos que ponían el 22-5 en el marcador y el punto bonus de
4 ensayos. Con ese resultado y con un Ávila que seguía jugando igual llega el
descanso y la charla con los entrenadores.
Muchas veces el resultado condiciona el ánimo del partido y
cuando llevas una buena distancia en el marcador puedes optar por dos caminos;
uno, seguir haciéndolo bien y continuar aumentando la distancia o, dos, conformarse
con lo que tienes y arriesgar el resultado.
En este caso, de forma involuntaria lógicamente, se eligió
la segunda de las opciones y se puso en riesgo el brillante resultado
conseguido hasta el momento. Desde el comienzo de la segunda mitad las apuestas de juego cambiaron y los
visitantes continuaron ejerciendo la presión y la penetración con sus
delanteros a base de fuerza y continuidad y los locales apostaron por el “¿a
que yo soy más fuerte?” y entraron en el juego visitante abandonando la rapidez, la alegría y el desparpajo con el que dominan a los contrarios. Esto llevó a la
consecución de dos ensayos de los visitantes en sendos ataques de todos sus
efectivos. En las dos ocasiones los ensayos muy esquinados obligaban a
transformaciones casi imposibles y el marcador no subió más allá de los 15
puntos para los castellanos. Dalton, ahora ya con la apuesta de la cerveza
ganada, consiguió transformar un golpe que ponía el 25-15 en el marcador, que
sería definitivo.
Jugaron:
1.- Juan
2.- Biber
3.- Anatalon
4.- Factorial
5.- Miguel
6.- Gaby
7.- Ivan
8.- Lanchas
9.- Virus
10.- Ufo
11.- Chasquis
12.- Dalton
13.- Arce
14.- Chile
15.- Antonio
También jugaron durante el partido, Dani, David, Juanma, Maqueda,
Patro y Landa
El partido fue vibrante, intenso y emocionante, pero no me
gustó que el CRA renunciase, aunque fuera por un rato, a su alegría y pasase
por un mal rato innecesario. Este equipo tiene mucha personalidad y deben
ejercerla durante los 80 minutos; así será muy complicado que no se consigan
los objetivos. Si te mimetizas con el contrario, éste te gana; si tú haces que el contrario juegue a tu juego, llevas las de ganar, o por lo menos es lo que
yo creo.
El resultado, magnífico y la moral por las nubes. Así que a
seguir trabajando para seguir haciéndolo tan bien como hasta ahora. Argggggggg
(Detalle final de los abulenses, un jaka divertidísimo por
haber perdido, son muy grandes, jeje)
